En Santa Gloria les gusta escuchar a sus clientes e innovar con los productos diarios como el pan, pero también con otros de capricho como la pastelería, bollería, smoothies o frappés. Y todo con el cuidado que se merece cada una de sus creaciones. Y si hay una creación estrella, son las GLORIAS, mini croissants hechos de mantequilla y recubiertos de un almíbar especial cuya receta se remonta a 1963.